miércoles, 30 de septiembre de 2009

15.29.09.09


La generosidad de Carmen alcanzó hasta para contagiarnos la gripe a Max y a mí. Semana de inducción en la U. Semana de mudanza. Semana de inicio.


Ayer lunes tenía una actividad de sólo media hora en UCL. El departamento de ciencia política entregaba el material de inducción a todos sus estudiantes de postgrado. Como tenía tiempo, me fui a leerlo minuciosamente a un Café muy agradable que pertenece a una librería cerca del British Museum y por lo tanto de UCL. Estuve hasta pasado la hora de almuerzo, así que primero, a media mañana, tomé una tetera de té negro con botones de rosas y luego, con el hambre, una sopa de papas y puerros, deliciosa, acompañada de unas tostadas con aceite de oliva y trozos de tomate deshidratado. Mientras leía concienzudamente se sentaron en la mesa del lado una señora que leyó el Guardian y comió un brownie. Un tipo en sus 40 que estaba empezando 2666 de Bolaño. Y al final tres aparentemente docentes que discutían sobre economía y política en Asia.

Caminé de vuelta hasta la parada de Euston donde tomo el bus 73 que pasa por la casa. Me senté en la primera fila del segundo piso a observar, desde el privilegio de esa perspectiva, la forma en que está organizada esta ciudad. En Sudamérica estamos acostumbrados al ordenamiento en cuadras, pero aquí, esta ciudad medieval, es un conjunto de pequeños pueblos reunidos y sus calles no responden a ninguna lógica. Sin embargo, me gusta el encanto que le confieren esas puntas de diamante o aquellas conjunciones de hasta 5 calles. Si bien me ha tocado sufrir en carne propia esta forma ilógica de ordenamiento, por ejemplo, cómo están numeradas las direcciones de las casas en una calle, su arquitectura, las puertas de color negro, azul o rojo, el ladrillo a la vista y casi siempre amarillento, le dan un charm muy especial. Afortunadamente las pares e impares están en veredas separadas, pero lo que no hay posibilidad alguna es que la numeración de una vereda coincida en secuencia con la de la vereda del frente. Es decir, puedo estar en el 4 y al frente haber un 103. Además, puedes encontrar Elm Street, Elm Road, Avenium, Grove, Terrace, Mews, Way, etc.


Llegué a la casa y después de una tarde bien conversada con Carmen, revisando, entre otras cosas, los ramos electivos que podría tomar, me preparé para ir a una reunión con la dueña de la casa (landlord). Llegué puntual, ella un par de minutos después y pidiendo disculpas. Es una señora muy agradable, de aquellas que te miran profundamente cuando le hablas. Le mostré mis antecedentes y ella la copia del contrato que tendremos que firmar los 4 tenants juntos (arrendatarios de piezas). Mientras, su marido e hijo, instalaban mi cama, colchón, sillón, clóset y cajonera. Creo que le causé buena impresión porque la sentí que fue relajándose hacia final. Es muy preocupada. Me preguntó todo el tiempo si necesitaba algo más.

Finalmente, ese día había acordado con otra becaria juntarnos un rato. A Alejandra la había conocido durante el desagradable proceso de tramitación de la visa, pero sólo por email. Acá habíamos hablado sólo por fono. Ella vive en un flat (departamento) que pertenece a UCL. Es para dos personas, ella y su marido, pero él llega en diciembre. Nos juntamos a cenar en su casa y se sumó una actriz recién egresada de la UC que vive en el mismo edificio. Ambas muy simpáticas. Nos quedamos hasta tarde conversando.


Hoy día amanecí resfriado y tenía que ir a la U a una inducción en temas administrativos. En realidad fue lo mismo que había leído el día anterior. Me quedé atrás del auditórium y pude observar a todos los alumnos del departamento y claramente debo ser el más viejo, además de que ellos lucen mucho menor de lo que esperaba.


Me vine temprano a la casa para cuidarme. Lavé mi ropa, escribí, leí, busqué información en Internet y descansé. Esperamos a Max para cenar, Carmen había preparado un plato marroquí. Cenamos, vimos la BBC donde destacaban el discurso de Gordon Brown. Ahora me vine a la cama, estoy cansado. Mañana es la matrícula, voy por mi tarjeta de débito al banco Abbey finalmente, y por la noche firmo el contrato de la casa.


Creo que con estas líneas comienza a cerrarse el prólogo de mi paso por esta isla. El cierre de etapas de instalación y la búsqueda de las hebras que manejarán mi destino ya están ad portas. Copio el texto en el blog, cierro el laptop y apago la luz.


3 comentarios:

  1. Ey! Qué bueno que ya tienes tu piececita!....Imaginaba que sería la tercera la opción escogida. Bueno sólo decir éxito en tu nueva etapa como estudiante. Me encantan los relatos lo primero que hago cuando prendo el PC acá en mi oficina es revisar viajenparacaidas)Casi puedo ver los lugares por donde caminas, saborear los platos y sentir el aire por donde vuelan esos pájaros. Cómo me gustaría aprender de tí esa forma de despegar...."no importa, vendrán otros"....bello, te dejo un beso.

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  2. This like a novel I can't wait to continue reading and knowing a bit more about the new characters in your new life.

    What about that beautiful indian girl of the shop, the beautiful german girlfriend of someone, the eyes of your landlady, the street corners like diamonds?

    a hug from your new prose-follower
    a kiss from me

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